A primera hora de ayer, el encargado de la panadería Jacqueline, de calle Angamos, fue alertado por los trabajadores de la empresa que desconocidos habrían ingresado al local sustrayendo alimentos y dinero. De inmediato, se dio aviso a la Policía de Investigaciones (PDI) quienes adoptaron el procedimiento de rigor. Los antisociales habrían descerrajado el candado que cerraba el acceso principal al recinto para luego sustraer algunos alimentos del interior y el dinero en efectivo que había en la caja registradora.
El encargado del local avaluó las pérdidas en una cifra cercana a los 200 mil pesos y se confirmó que no habrían seguros comprometidos.
Otro hecho de similares características se produjo a tres cuadras del lugar, en la empresa ubicada en Zenteno 72, donde desconocidos habrían ingresado al patio de la propiedad, aparentemente con el ánimo de sustraer especies, sin embargo sólo produjeron daños en el edificio.