A casi un mes de ocurrido este lamentable hecho, los resultados del peritaje no han entregado un resultado definitivo por lo que la evidencia que pueda dar fin a estas investigaciones aún se encuentra entre los escombros de la vieja casona de José Menéndez 551.
Esto implicaría que los restos de la edificación aún no puedan ser demolidos, lo que causa preocupación a la comunidad es que ante la posibilidad de fuertes vientos como los registrados el 18 de septiembre, donde hubo ráfagas de hasta 124 kilómetros, se derrumbe la estructura y cause lesiones a personas o daños a otras construcciones o automóviles cercanos.
En ese sentido, Bomberos informó que parte de la techumbre y escombros ligeros, fueron removidos en previsión de un posible accidente, además de acordonar el área para evitar el paso de peatones.
Irresponsabilidad
Gran cantidad de personas han hecho caso omiso del acordonamiento, sin tomar en cuenta su seguridad.
En ese sentido, Diario El Pingüino ha sido testigo de cómo estas señalizaciones son ignoradas por algunos ciudadanos, entre los que destacan algunos escolares que se acercan para tomar fotografías.
Otro aspecto que llama la atención son los viajeros que deben abordar buses interprovinciales en ese punto y utilizan el área acordonada como “sala de espera”.
Peritaje
El informe final que será entregado a la fiscalía para determinar el procedimiento a seguir debería ser entregado a fines de este mes.