
Olate,representando al Liceo de Niñas, fue elegida la Reina de la Primavera de 1974, por eso no es de extrañar que dos de sus sobrinas, Alejandra y Valentina, hayan sido elegidas reinas del Carnaval de Invierno.
En 1995, motivada por jugadores y amigos, decide incursionar como entrenadora y lo hace en el exitoso quinteto de Ganadera Gutiérrez Varillas en la Categoría 45 años.
-¿Quién la induce a dirigir?
“Bueno, el hecho de haber conocido a mi esposo (Lolo Muñiz) generalmente me lo pasaba en el gimnasio, fui la esposa que siempre estuvo al lado de él; cuando nacieron nuestros hijos también íbamos mucho al Gimnasio de la Confederación, por lo tanto siempre estuve cercana a la actividad cestera, reconozco que no sé mucho de básquetbol, pero sí soy una apasionada por este deporte por eso cuando me propusieron dirigir tomé el desafío”.
-¿Cómo es la relación con el equipo?
“La verdad es que es la mejor, hace recién cuatro años que estoy más involucrada en la dirección técnica pero siempre pidiéndole consejos a los más experimentados, además tenemos una linda relación con las familias porque a mi me gusta que la familia vaya hacerle barra al equipo”.
-¿Cómo maneja el tema con los jugadores que no tienen tantos minutos en cancha?
“ Yo siempre estoy al lado de ellos y les digo que somos un equipo y que en los partidos más importantes tenemos que contar con lo mejor que tenemos, eso se entiende, por eso destaco el apoyo de los que habitualmente no juegan tanto, pero siempre tienen su oportunidad”.
-¿Qué situaciones han marcado a Patricia Olate en esta etapa?
“Nosotros como equipo hemos tenido muchos logros deportivos, pero sin duda que el momento que nos marcó y para siempre fue la muerte de Hernán Melipillán , un mes antes de su deceso ya se había desvanecido por lo que pensábamos que no iba a seguir jugando, pero ese domingo fatídico cuando jugábamos con Aviación yo le pregunte, ‘Hernán te sientes bien ;¿ puedes jugar?’, y el me respondió si estoy en condiciones, el cardiólogo me dijo que puedo jugar hasta cuatro veces a la semana, sólo le faltaba hacerse el test de esfuerzo que no alcanzo a hacerlo, la familia nos dijo que muría haciendo lo que más le gustaba por eso para nosotros todos estos triunfos son para él y su padre Zenón Melipillán que fue un destacado dirigente del Español”.
-¿Cómo ve el nivel del Maxibásquetbol?
“Bueno, creo que toda esa gente que alguna vez estuvo en primera es un ejemplo para la juventud de hoy, no hay que olvidarse que antes había sólo un gimnasio y a las seis de la mañana entrenaban al lado de la canchita de la confederación, la educación cestera que tuvieron ellos es muy distinta a la de ahora”.
-¿Cómo es el apoyo del empresario Jaime Gutiérrez Varillas?
“Excelente, estamos muy agradecidos de él y de su señora, sin su aporte sería complicado poder participar, hace dos años que nos está respaldando”.
-¿Por qué razón falta el apoyo del club Español?
“ Me parece que pasa por el desinterés de la Sociedad Española que están más preocupados de aparecer en la prensa que apoyar las diferentes actividades del club, existen muchos que no van a los gimnasios, recuerdo que después de 15 años que el primer equipo fue campeón cuando jugó por nosotros Luciano Dala Fontana y le pedimos apoyo para que él siguiera con nosotros,tuvimos cero respaldo”.