
“No puedo entregar detalles de la diligencia porque es secreto del sumario”, respondió, excusándose de no poder dar a conocer la diligencia que realizó en Punta Arenas.
Sin embargo, trascendió en fuentes judiciales que el ministro Valderrama se trasladó a Magallanes para interrogar al ex teniente de Carabineros Jorge Rodríguez Márquez, quien está radicado en Punta Arenas, porque en 2004 le entregó a Paola Papi Beyer, madre de Anfruns, un testimonio que inculpaba a agentes del Estado -presumiblemente de Investigaciones o de la Central Nacional de Informaciones (CNI)- en la muerte de su hijo. “Yo soy testigo de que a él lo trajeron, nosotros vimos ingresar el vehículo y vimos el cuerpo de Rodrigo en el portamaletas. Era un vehículo típico de la gente de Investigaciones o de la CNI de la época, no recuerdo la marca, pero tipo Opala, verde oscuro”, fue la declaración que en ese entonces entregó el oficial policial.
El niño fue visto por última vez en el antejardín de la casa de los abuelos, en la comuna de Providencia, el 3 de junio de 1979. Días después un adolescente, de entonces 16 años, Patricio Pincheira confesó el crimen y entregó la ubicación de cuerpo de Anfruns. La familia no le creyó y el juez de la época ordenó el cierre del caso (en 1982), declarando al menor sin discernimiento. El 1 de abril de 2010 la justicia ordenó reabrir el caso. Y este lunes, como el mismo ministro Valderrama lo confirmó, dio curso a la solicitud de la familia de Rodrigo Anfruns para que éste sea exhumado, en el marco de la investigación para esclarecer las circunstancias de su muerte.