En octubre, el cambio de estaciones produce un incremento en la intensidad y frecuencia de las ráfagas de viento que azotan a Punta Arenas, debido al desplazamiento de masas de aire frío por vientos cálidos que caracterizan a la primavera. Durante las últimas semanas, los habitantes de la capital de Magallanes han sido testigos de cómo la fuerza de estos vientos puede arrasar en segundos con grandes estructuras y generar caos entre la comunidad.
Ayer, estas ráfagas dejaron nuevamente en evidencia el poder destructivo que tienen, ya que los vientos que alcanzaron velocidades de hasta 92 km/h, según informó el Centro Meteorológico Zonal Austral, derribaron una estructura de protección para la lluvia sobre la avenida Costanera del Estrecho.
Esta estructura cedió finalmente ante el embate constante del viento, pero en el trasfondo, las pésimas labores de mantención en torno a los aditamentos de la costanera y las instalaciones en general.
Desde hace algunas semanas, una familia magallánica se percató del mal estado en que se encontraba esta estructura la cual podría causar serias lesiones o una situación peor si cayera sobre algún peatón.
Al igual que esta protección, el resto de las estructuras metálicas a lo largo de la costanera podrían en determinado momento ceder ante los efectos corrosivos de la brisa marina y los fuertes vientos magallánicos y los deficientes diseños estructurales, por lo que una mantención constante del municipio es una necesidad.
Para este fin de semana, se han pronosticado vientos superiores a los 90 kilómetros por hora proveniente del suroeste y lluvia, por lo que se recomienda a la comunidad tomar las precauciones necesarias para evitar algún accidente a causa de estas fuertes ráfagas.
Estructuras peligrosas
En ese sentido, uno de los peligros latentes para la comunidad es el mal estado en que se encuentran algunas edificaciones de la ciudad, tales como casas abandonadas, letrero publicitarios en mal estado o techumbres de algunos domicilios y edificios.
Aunque hasta el momento no se han registrado accidentes o situaciones que lamentar, se hace un llamado a las personas a permanecer en casa cuando se presenten estas ráfagas, ya que los objetos desprendidos por el viento, y la basura que se encuentra en las calles pueden producir serias lesiones por la velocidad a la que son arrastrados.
Este llamado se hace además, para crear un sentido de responsabilidad en los habitantes, y realizar la mantención correspondiente a sus viviendas y evitar tragedias.