
Durante la votación, hubo senadores que criticaron la iniciativa. Juan Pablo Letelier (PS) votó en contra porque, a su juicio, el sólo hecho de endurecer las penas no va a modificar las altas tasas de consumo de alcohol en la sociedad.
El legislador sostuvo que mientras no se prohiba drásticamente la publicidad que realizan las empresas para vender bebidas alcohólicas, no se va a cambiar este comportamiento.
Con la nueva normativa, se considera como conducción en “estado de ebriedad” a quienes registren desde 0.8 gramos de alcohol por litro de sangre (antes era 1 gramo), mientras que se estará “bajo la influencia del alcohol” desde los 0,3 gramos (antes era 0,5).