
Al otro día, Haidé llamó a su madre para preguntar por Claudia, momentos en que la abuela de la menor señaló que no había pasado la noche en su hogar. En esos instantes la mujer comenzó a llamar por celular a su hija, quien tenía su teléfono apagado, por lo que decidió interponer una denuncia ante Carabineros de Punta Arenas.
El viernes por la noche recién Haidé pudo tener contacto a través de Facebook, donde la menor le indicaba que estaba bien y que la perdonara: “Me dijo que la perdonara, pero que no podía salir de donde estaba. Cuando le pregunté por qué no podía, le dije que si estaba amenazada. Me contestó que sí y que no podía seguir hablando”.
La madre estuvo desesperada y no sabía qué hacer. Se contactó con amigos de la joven, quienes le indicaron que no sabían nada.
La última información la conoció cuando se encontraba en Pingüino Radio, donde recibió una llamada desde Puerto Natales de una testigo que dijo haber visto a la menor deambulando por el centro de la capital de Última Esperanza, con la ropa que fue vista por última vez por su madre y solicitando dinero porque se encontraba sin comer y sin bañarse, por lo que la madre de la menor concurrió a entregar estos antecedentes a Carabineros.
Los abuelos de la menor viajaron luego de conocer que había sido vista en Natales, por lo que ayer cerca de las 19 horas la joven llegó en un bus, tras lo cual se encontraba bastante afectada.