
Con la partida de los representantes del Ejecutivo, las negociaciones vuelven nuevamente a fojas cero, acentuándose en las últimas horas en Puerto Aysén los enfrentamientos entre los pobladores movilizados y efectivos de las Fuerzas Especiales de Carabineros que intentan despejar los caminos de acceso a la ciudad que permanecen bloqueados por una gran cantidad de personas que impide con barricadas el paso de los vehículos policiales.
Según Iván Fuentes, portavoz del Movimiento Social por Aysén, en los enfrentamientos han habido muchas personas heridas y una de ellas perdió la visión en un ojo, una información que han difundido también periodistas que se encuentran en el lugar.
Con las protestas, que comenzaron el 13 de febrero, los vecinos de Aysén, de apenas 105.000 habitantes, piden medidas que mitiguen el aislamiento de esta región, con problemas de conectividad y dedicada a la pesca, la ganadería y el turismo.
Por su parte el vocero de Gobierno, Andrés Chadwick, respaldó ayer el accionar de Carabineros para controlar las protestas y liberar accesos bloqueados en la XI región, tras la suspensión del diálogo por la reactivación de focos de violencia en Aysén.
Durante la mañana de ayer, el senador RN Antonio Horvath denunció “una situación de enfrentamientos demasiado fuertes con la policía en Puerto Aysén” y que Carabineros estaba “atacando con bombas lacrimógenas a personas inocentes en sus casas”.
La denuncia fue desestimada por Chadwick, quien acusó a sectores de reiniciar la violencia en momentos en que el diálogo entre dirigentes sociales y el ministro de Energía, Rodrigo Álvarez, se iba a retomar en Coyhaique.
“Aquí no ha habido ningún engaño y ponemos a la opinión pública como testigo –dijo Chadwick en La Moneda-. Mientras se había logrado ya un procedimiento, que era el más natural y lógico y así había sido convenido, de formar comisiones y de trabajar en conjunto en cada una de las áreas, y se iba a desarrollar este diálogo, llegó la información que los propios dirigentes fueron los primeros en recibirla y transmitirla, de que se estaban generado barricadas y cortes de camino en Aysén y que la policía de Carabineros obviamente se veía obligado a actuar”.
Ante la reactivación de la violencia, Chadwick agregó que se planteó a los líderes del movimiento social que intentaran tranquilizar a los manifestantes: “Eso no se produjo. Durante toda la noche tuvimos actos de violencia, más de cuatro a cinco caminos cortados, incluyendo el puente de Aysén y, por consiguiente, están las imágenes y toda la información que proviene de la zona en que indica en que en el momento en que el diálogo se iba a iniciar, precisamente en ese momento, se inician los cortes de camino”.
En esa línea, la autoridad agregó que el Ejecutivo volvió a considerar la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado en contra de las personas que no quieren dialogar y están “liderando la violencia” en la zona. “Estamos esperando que nos lleguen (los informes) de quiénes serían las personas que están liderando, no el diálogo, sino que las acciones de violencia. Con esos antecedentes, el Gobierno va a evaluar la presentación de la Ley de Seguridad”, dijo.