Varias familias damnificadas que han recibido el subsidio de emergencia entregado por el Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu), tras sufrir inundaciones en sus domicilios por el desborde del Río Las Minas, han manifestado su preocupación por no contar con los recursos para contratar mano de obra que realice la reconstrucción de sus hogares. Esto porque la ayuda del Gobierno donada a través de una tarjeta, varía entre los $700.000 y $1.300.000, dinero con el cual pueden adquirir materiales de construcción, pero al momento de contratar los servicios de maestros carpinteros o de otro tipo de trabajadores, deben cancelar entre $300.000 y $1.000.000, cifras inalcanzables para estas familias que sufren a diario el dolor de haber perdido no sólo su inmueble, sino que todos sus enseres.
Por este motivo es que algunos anegados, como es el caso del vecino de Playa Norte, Héctor Carvajal, han decidido por sus propios medios reconstruir sus viviendas.

Manual de Reparación

Este es uno de los motivos por los que el Serviu, junto con el subsidio, hace entrega a los anegados de un “Manual de Recuperación de la Vivienda”, en el cual, como señaló Giovanna Navarrete, supervisora del Programa de Protección al Patrimonio Familiar,” se indican los procedimientos constructivos para la utilización de materiales factibles de adquirir con la tarjeta Banco Materiales”.
A su vez, “el manual en si explica las diferentes etapas que tienen que ir cumpliendo ellos para poder instalar un material, desde cuanto material comprar a cómo instalarlo y qué herramientas utilizar”, señaló Navarrete.
El documento que se le entrega a los beneficiados con la tarjeta, contiene más de 20 páginas de indicaciones, entre las que destacan cambios de bases; instalación de piezas de madera; terminaciones; revestimiento interior; revestimiento de piso; cambio revestimiento tabique interior; mejoramiento revestimiento exterior, y aplicación de pinturas, entre otras instalaciones de servicios.
Calificación de daños
Dejó en claro por su parte, Nancy Oliva, profesional del Programa de Gestión de Calidad, que se debe tener en consideración que este es un subsidio de reparación, señalando que muchos vecinos retiraron todo el piso del inmueble y están haciendo una especie de mejora del mismo, siendo que los recursos entregados son exclusivamente para un único fin según la clasificación de los tipos de daños.
Los dineros son entregados según una escala preparada por el Serviu, la que se divide en daños leves, medios, graves, e irrecuperables.
Cabe señalar que los usuarios de la tarjeta al concurrir a los locales comerciales establecidos para realizar las compras de materiales, deben presentar su cédula de identidad y no realizar más de cuatro compras en las ferreterías con convenio, debido a que si realizan esta acción, como ya le ha ocurrido a dos damnificados, el beneficio caduca.
Además los materiales que se adquieran deben coincidir con un listado entregado a cada uno de ellos, los cuales están divididos entre elementos estructurales; revestimientos; terminaciones lineales; molduras; aislantes; pinturas; adhesivos y sellantes; fijaciones y accesorios para fijación; aridos, y herramientas, entre otros.
Todos aquellos materiales que no están incluidos en la lista, no pueden ser adquiridos por los vecinos, prohibiéndose su venta en las ferreterías que realizaron convenio con el Serviu, entre las que destacan CROSUR Esteban Guic y Cía. Ltda., Ferretería El Águila Ltda., Drpic y Cía Ltda., Comercial de la Patagonia Ltda., Ingeniería del Estrecho y Cía Ltda, y Sodimac S.A.
Cabe recordar que a la fecha han sido 100 los beneficiarios que han recibido esta tarjeta, esperándose que la próxima semana otras 100 personas obtengan este subsidio de emergencia.