
La semana recién pasada, las temperaturas bajo cero en la Región de Magallanes fue el aviso para que los diferentes sectores comiencen a prepararse para uno de los inviernos más complejos y que repercute fuertemente en las diferentes estancias, ya que los animales deben comer forraje, y los caminos que se cortan por la nieve, limitando la conectividad para entregar la ayuda.
Protocolo
de emergencia
Una de las gestiones que se llevó a cabo durante la semana pasada, fue una reunión entre el seremi de Agricultura, Manuel Bitsch, y el director regional de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) Magallanes, Cristián Gallardo, los cuales unificaron criterios y experiencias, para establecer las acciones ante una eventual emergencia agrícola en la época invernal.
En este sentido y según lo señalado por el seremi de Agricultura, “dejamos establecidas con claridad las diferentes etapas de una emergencia con las características de la que tuvimos el año pasado en la comuna de Timaukel, fijando como criterio fundamental la necesidad de mantener la conectividad, con caminos expeditos que aseguren el acceso hasta las instalaciones de todos los predios del área que pudiere verse afectada, para lo cual bastaría con decretar una Alerta Amarilla, que permite disponer de los medios necesarios para realizar ese trabajo”. Para ello, el titular de la Onemi manifestó que ya se han realizado reuniones con la Dirección Regional de Vialidad, objeto de acelerar los tiempos de respuesta de la maquinaria propia o contratada que ese servicio tiene dispuesta en distintos lugares de la región.
Ganaderos
“El año pasado fue un invierno bastante crudo, en el sector donde estamos nosotros que es en Río Verde, pero por todos es sabido que Tierra del Fuego lo pasaron bastante mal, ya que tuvieron problemas de forraje y conectividad, pero nosotros hace mucho tiempo que tomamos las precauciones correspondientes que ameritan los inviernos, sin saber si serán fuertes o no, por eso siempre sembramos y tenemos forraje guardado, ya que los más de 50 años que llevo metido en esto nos ha enseñado a trabajar de esa forma, por eso siempre lo hacemos aunque nos sobre, porque Magallanes es una zona muy variable y nadie sabe lo que va a pasar en esa época, ya que no existe ninguna tecnología que te diga lo que va a pasar en esa época”, expresó Rodolfo Concha, quien junto a sus hijos administran la estancia Olga Teresa con más de 7 mil lanares, ubicada a 78 kilómetros al norte de Punta Arenas, en la comuna de Río Verde.
Asimismo, el ganadero Mario Vega, dueño y administrador de la estacia Las Lomas, en Laguna Blanca, expresó: “Lo fundamental es tener los animales en buen estado al inicio del invierno, de tal manera de que puedan resistir un invierno riguroso y si es posible, los que no cosechan pasto propio, comprar un stock para mantener en caso de alguna emergencia, pero lo fundamental a mi opinión, es tener a los animales en buen estado y en los campos que sean menos riesgosos para el invierno”.
En este sentido, el ganadero valoró las acciones que se están realizando a nivel de autoridades, “esto siempre va a ayudar, porque nosotros, los estancieros no contamos con las máquinas para mejorar la conectividad en invierno, cosa que es muy importante para nosotros, me parece muy bien, yo sé que ellos tienen identificados los puntos con más riesgos, sólo espero que este invierno este todo normal”.