El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, almorzó ayer con la bancada de diputados de Renovación Nacional, siguiendo con la ronda de conversaciones por la reforma tributaria, luego que el martes desarrollara una cita similar con la UDI. En el encuentro, los parlamentarios le hicieron ver sus puntos de vista, algunos de ellos críticos, como el planteado por el diputado Joaquín Godoy acerca de la rebaja de impuestos a quienes más tienen.
El ministro sostuvo que “hay que ver la evolución que esto ha seguido en el tiempo. A principios de los 90’ el impuesto al tramo más alto era de 50%. La Concertación lo bajó dos veces: primero a 45% y luego a 40%. Nosotros estamos haciendo un esfuerzo mayor y más potente para los sectores que pagan menos impuestos, a través de la rebaja de tasas que es más potente en los sectores más bajos, del crédito tributario a la educación y adicionalmente la reliquidación del impuesto de segunda categoría”.
Respecto al planteamiento de llegar a un arancel cero en 2015, el jefe de las finanzas públicas planteó que se “sigue un proceso que viene desde mediados de los `70. En los últimos 20 años han ocurrido dos rebajas arancelarias: Una de 15% a 11%, otra de 11% a 6%, y nosotros estamos llevándolo de 6% a 0%, y esperamos que haya buena voluntad de aquellos que también votaron favorablemente las dos rebajas arancelarias anteriores”.
Larraín desestimó que existiera tensión en las citas parlamentarias. “Es un error decir que las sesiones y las conversaciones han sido tensas. Son sesiones muy francas, tuve un almuerzo muy grato ayer con la UDI y no tuvo nada de tenso, cada uno tiene derecho a plantear los temas que le preocupan”.
Consultado por el ingreso del proyecto que flexibiliza el Sipco, reiteró que se presentará dentro de la semana. “No hay presión, hay preocupación. No hay atraso, hemos hablado de esta semana y esta semana dura hasta el viernes en la tarde”.
Y apuntó que “la buena noticia es que hoy nos van a anunciar una rebaja sustantiva en los precios de los combustibles. Esta tarde (ayer) vamos a tener el comunicado de ENAP y es una rebaja de dos dígitos (más de $ 10 por litro)”.
Discusión seria
El ex presidente del Banco Central, José de Gregorio, indicó que espera una discusión “más de números que slogans”, respecto a la reforma tributaria que el Ejecutivo ingresó al Parlamento.
La autoridad, quien participó en el “Southern Cone/Andean CEO Conferencia 2012”, organizado por BTG Pactual y Celfin Capital, dijo que el anuncio realizado por el Gobierno demuestra que, fuera de colores políticos, “Chile es un país sólido porque el gobierno dice cómo lo va a financiar, con ingresos corrientes y no va a gastar lo que no tiene, y eso como norma de conducción de política fiscal es muy buena”.
Pese a esto, De Gregorio señaló que tiene “serias dudas” en la parte tributaria, “en cuán distributiva o cuán negativa sería en materia de equidad y eso espero que haya una discusión seria, con más números que con slogan”.
“Esperamos que en el Congreso se discuta un poquito más en serio (ya que) Chile tiene problemas de equidad y uno no va resolver problemas de equidad con el tema tributario, pero no espera deteriorarlos con el tema tributario”, comentó.
Puntualizó que cuando se mira el anuncio de reforma, “parece una idea que uno aplaudiría, y dice descontemos gastos en educación de las familias de clase media, pero esas familias mandan a sus hijos a colegios con co pago, entonces lo que esto va hacer es un subsidio a los colegios de co pago en contra de los colegios donde van los niños más pobres y la evidencia que yo he visto, es que este sistema crea una segregación que no es muy buena para mejorar la calidad y la integración de la educación en Chile”.
Respecto al tema macro de la propuesta del Gobierno, De Gregorio comentó que “Chile es un país que ha demostrado bastante madurez y es lo que se ha hecho con este anuncio; que si uno quiere gastar más lo financia y esa es la manera de mitigar su impacto sobre lo macro, y por otra parte es una manera de hacer buenas finanzas públicas, que es si yo voy a gastar, lo voy a gastar con mis ingresos y no voy a estar gastando si no tengo los ingresos, y eso es una historia de muchos años de la economía chilena de buen manejo de finanzas públicas”.