“La oración ha funcionado porque mi niño dio luces de recuperación”, dijo muy contenta Nury Williams, abuela del estudiante de segundo básico del Colegio Miguel de Cervantes, Benjamín Cisterna Saldivia, de siete años, quien se agravó después de una operación de apéndice en la Clínica Magallanes. La condición crítica fue lo que llevó a los médicos a trasladarlo a la UCI Pediátrica del Hospital Clínico. Por lo mismo, dos familias que no se conocían se unieron por la desgracia: los padres de Jeffrey García y Benjamín Cisterna.
El hospital informó que este último ingresó el viernes, a las 6.30 horas, producto de un cuadro respiratorio severo (distrés respiratorio agudo), por lo que fue entubado y conectado a ventilación mecánica.
Ayer, según la familia, mostró signos de una leve recuperación. Importante para ellos, porque así como ingresó a la UCI quiere decir que puede revertir su grave estado.
Por la tarde, a las 19 horas, todos se unieron en oración, en la Iglesia Nuestra Señora de Loreto, donde se ofició una concurrida misa.
El día anterior, la doctora Amarales explicó que el menor sufrió un cuadro aspirativo de contenido gástrico (vómito) después de ser operado de urgencia del apéndice.
Manuel Cisterna, abuelo del niño, se sumó a las muestras de agradecimiento.