El ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, anunció además el adelantamiento del plan invierno, debido a que "Chile está viviendo una verdadera emergencia polar". Esta mañana se reunió el consejo de ministros de Desarrollo Social con el propósito de analizar los compromisos adquiridos en esta materia el pasado 21 de mayo, en el marco del discurso presidencial, y el titular de esta cartera, Joaquín Lavín, manifestó que el gobierno espera que uno de los principales anuncios consistente en un bono de alimentos para las familias más vulnerables del país, pueda ser entregado a partir del próximo 5 de julio.
"La prioridad número uno sigue siendo el bono de alimentos. Agradecemos la aprobación en menos de 24 horas en la Cámara de Diputados. Esperamos la misma rapidez en el Senado para poder despacharlo así la próxima semana, y desde ahí se cuentan 11 días hábiles para comenzar a pagar este bono. Si todo va en los plazos que pensamos, el bono debería comenzar a pagarse de el día 5 de julio", sostuvo Lavín.
El secretario de Estado argumentó que el Ejecutivo dio a conocer 40 nuevos compromisos de carácter social, de los cuales siete si significan proyectos de ley. De estos, dos ya han sido enviados al Congreso: el bono de alimentos y el del nuevo financiamiento estudiantil para la educación superior. Mientras que el proyecto que crea el servicio de protección de la infancia y de la adolescencia, será enviado en los próximos días.
Asimismo, el ministro de Desarrollo Social, confirmó que se adelantará la campaña de invierno. "Chile está viviendo una verdadera emergencia polar, con temperaturas bastante inusuales (...) para esta época del año", recalcó.
Entre las medidas, también está contemplado el adelantamiento del plan calle con 57 albergues extra que se abrirán durante este invierno. En la misma línea, Lavín hizo un llamado a las personas que vean a gente en la intemperie y sin abrigo, a que los deriven a alguno de estos albergues. "Nos preocupa lo que está pasando y queremos que esta campaña de invierno funcione de verdad y no tengamos que lamentar las 50 personas que fallecieron el año 2011 en el invierno", enfatizó.
Por su parte el ministro de Salud, Jaime Mañalich, indicó que "hemos decidido adelantar la segunda fase del plan de invierno que estaba programado para este año a partir del mes de julio" con el objetivo de evitar el colapso por enfermedades respiratorias en el los centros asistenciales del país.
Esto contempla la apertura de camas, la reutilización de sectores no ocupados en hospitales, la suplementación de la planta de trabajadores y profesionales de la salud, la apertura de 15 servicios de urgencia urbanos en la región metropolitana y la extensión de los horarios en los centros de salud familiar, entre otras medidas.
"Esta emergencia polar está complicándonos mucho y está llevando a un aumento muy vertiginoso de número de consultas y hospitalizaciones y, por lo tanto, tenemos que adelantar la respuesta a esa necesidad", dijo Mañalich.