"Todos sabíamos lo que iba a pasar", dijo el jefe comunal, junto con asegurar que son cientos los daños a la propiedad pública y privada, que dejaron los disturbios. El alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, se refirió a los disturbios que se produjeron esta jornada en el marco del homenaje a Pinochet en el Teatro Caupolicán, y calificó como "un error" haber autorizado dicho acto.
"Yo lo dije antes (...) que hubiera preferido que no se haga, porque todos sabíamos lo que iba a pasar. Yo creo que Chile necesita mirar hacia delante", enfatizó el edil en conversación con CNN. "Los vecinos de Santiago están cansados", continuó.
Según el jefe comuna, en más de 10 puntos de la comuna se produjeron enfrentamientos entre los detractores de Pinochet y Carabineros, dejando "cientos de daños a la propiedad pública y privada".
No obstante, Zalaquett no precisó el avalúo de daños, "porque todavía siguen los incidentes", recalcó. Y añadió que se tomarán las represalias que correspondan.
El alcalde enfatizó que si bien se trató de grupos aislados, se recibieron miles de reclamos a las líneas 800 del municipio por los desórdenes. "Hay mucho lumpen que se aprovecha de esto, que no está por la causa de los Derechos Humanos", dijo.