
El coordinador de Seguridad Pública, Ricardo Chavarría, manifestó que la elaboración y entrega de esta guía no es sólo para que la gente lo reciba, “necesitamos que los vecinos la lean y apliquen las recomendaciones que se señalan”, enfatizó, ya que es un manual con lenguaje claro, directo y que incorpora ejemplos para que no existan confusiones respecto de cómo llevar a cabo las medidas de seguridad.
Los temas abordados por el impreso contemplan errores comunes que comenten las personas en el cuidado de su residencia y que deben ser evitados porque generan riesgos, así como otras que son esenciales de aplicar para aumentar el nivel de protección. Por esto se presentan recomendaciones para contar, por ejemplo, con una adecuada visibilidad desde y hacia el hogar, óptima iluminación, para evitar escalamiento, mantención de muros, controles de acceso, manejo de correspondencia, uso de estacionamientos, entre otros aspectos que con una pequeña modificación en la conducta dejan de ser una ayuda para el actuar de los delincuentes.
A nivel local, es relevante que los vecinos procuren mantener iluminadas las puertas de acceso a la vivienda, evitar tener elementos cerca de las rejas porque permiten su escalamiento, dejar siempre cerradas con llave y seguro las puertas y ventanas, mantener limpio el antejardín y la vereda, por señalar algunos hábitos que deben ser incorporados en el día a día.
Finalmente, en la parte posterior de la guía se añadió una pauta de chequeo para que cada persona pueda corroborar la aplicación de las recomendaciones y no dejar ningún aspecto pendiente que pueda abrir un espacio a los delitos.