Ayer fue formalizado en el Juzgado de Garantía de Punta Arenas una persona de 23 años, quien la noche del jueves fue detenido por porte de droga y mantener en su domicilio elementos para su dosificación. El hecho se registró a las 22.30 de la noche del jueves, cuando el imputado Jonathan Barría Barría se encontraba en la población Loteo del Mar al interior de su vehículo, momento en que fue fiscalizado por personal policial. Al momento de la revisión se le encontró la cantidad de 30 envoltorios de marihuana prensada dosificada lista para su venta, tal como lo señaló el teniente coronel Claudio Meneses, subprefecto de los Servicios de Carabineros: “Personal de la Sección OS-7, tras efectuar un patrullaje preventivo, sorprendió a un sujeto que se aprestaba a comercializar droga. A raíz de esto se le detuvo y se le incautaron doscientas dosis, que traducidas en dinero alcanzan la suma de 500 mil pesos, además de la incautación del vehículo donde transportaba el alucinógeno, por lo que fue puesto a disposición de la fiscalía”.
Por este motivo, pasadas las 13 horas de ayer, en el Juzgado de Garantía de Punta Arenas el fiscal Eugenio Campos formalizó a Barría por infracción a la Ley 20.000 de porte ilegal de drogas.
El fiscal detalló que la detención se realizó en la intersección de las calles Pedro Bórquez con Mar Adriático, cuando el joven transportaba diversos elementos de la droga cannabis sativa en su vehículo marca Peugeot 206, patente ZD 38 15. Además se le encontró la suma de 80 mil pesos en efectivo y tres celulares. Asimismo, se allanó su domicilio en la Población Fitz Roy de Punta Arenas, donde se encontró una mochila que contenía una bolsa con droga, además de una juguera destinada para moler la marihuana, una tapa de botella para la dosificación de la droga, una pesa digital y diversos trozos de papel de diario para la elaboración de los envoltorios.
El total de la droga incautada alcanzó los 94 gramos, lo que equivale a 200 dosis con un valor comercial del medio millón de pesos.
Por este motivo, el fiscal Campos solicitó al juez Jaime Álvarez la medida cautelar de arraigo regional para el imputado, a la que el defensor Guillermo Ibacache no se opuso.
Se fijaron 60 días como plazo para el cierre de la investigación.