
Organizaciones de mujeres uruguayas reclaman el derecho a abortar “sin tutelas”, ante la decisión de la Cámara de Diputados de aprobar un proyecto de ley que despenaliza el aborto, pero que dividió a la población y abrió brechas dentro de los partidos políticos. La nueva norma impone algunas condiciones a las mujeres, como por ejemplo, abortar antes de las 12 semanas de gestación y someterse a un grupo interdisciplinario, integrado por un ginecólogo, un especialista en salud mental y otro del área social, que asesorará y sugerirá cinco días de reflexión respecto de la decisión.
El proyecto aprobado fue el resultado de una ardua negociación política que logró finalmente sumar a un diputado de la oposición para alcanzar la mayoría de 50 votos contra 49, entre los 99 integrantes de la Cámara de Diputados.