Ayer se cumplió un mes del brutal accidente que dejó con graves lesiones a Pablo Ojeda Muñoz, de 17 años. El hecho que ocurrió cerca de las 22.30 horas del sábado 8 de septiembre, cuando Ojeda conducía un jeep y a la altura del kilómetro 8,5 de la Ruta 9 Norte su móvil fue chocado por un camión. Tras el choque, el joven de 17 años, junto a su polola Verónica Moggia, de 16, fueron internados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Clínico de Magallanes. La joven fue dada de alta, mientras que Pablo Ojeda estuvo durante todo este mes en la UCI, producto de un tec cerrado, por lo que estuvo en coma inducido y con respiración artificial.
Su madre, Maribel Muñoz (en la foto), se mostró esperanzada la tarde de ayer, luego que le informaran que el joven salió de la UCI para ser trasladado a la Unidad de Tratamiento Intensivo (UTI), donde permanece estable. “Es alentadora la noticia ya que mi hijo pasó treinta días acá, los cuales han sido agotadores. Gracias a Dios vemos una gotita de esperanza, esperando que continúe rehabilitándose y, ojalá, en un mes más poder llevarlo para la casa caminando, que es lo que quiero”.
La madre del accidentado señaló que aún no saben el daño neurológico con el que quedará producto del fuerte impacto, pero agregó que no tiene otros órganos dañados. “Todavía no se sabe si va a tener secuelas, pero lo importante es que está con nosotros. Le sacaron el respirador artificial y también de a poco lo están sacando del coma inducido. A su polola, cuando lo visitó (ayer), la siguió con la mirada.Todo esto nos mantiene esperanzados”.