
El contraalmirante José Miguel Rivera, que ayer entregó la jefatura de la comandancia en jefe de la Tercera Zona Naval, destacó haber sido partícipe, durante su mando, de dos hechos que remecieron espiritual y materialmente a la región. “Me refiero al siniestro que a fines de diciembre del año pasado afectó al Parque Nacional Torres del Paine, con el consecuente deterioro ecológico y económico que provocó el evento, y a la catástrofe natural que significó el aluvión del 11 de marzo y que golpeó con rudeza parte importante de Punta Arenas”. Recordó en su discurso de despedida que frente a ambas tragedias, “la Tercera Zona Naval estuvo presente, acudiendo con sus medios de transporte en labores de rescate, participando con cuadrillas que sacrificadamente contribuyeron a la extinción del siniestro, como en el despeje de distintas vías cubiertas por el lodo” (más antecedentes en Diario El Pingüino).