En el lugar valoró el esfuerzo de la vecina de reconstruir el hogar que por más de 50 años la ha cobijado, para lo cual utilizó la tarjeta entregada por el Serviu con 1 millón 300 mil pesos. Con ésta costeó la construcción del radier de toda la propiedad, la instalación de alfombra y de cerámicos.
“Era un mar esto aquí, no había para donde sacar el quite para nada. Barro, de todo se veía”, recuerda la damnificada, sosteniendo que esa noche estaba durmiendo cuando su hija llegó, la despertó y evitó que el aluvión pudiese haber cobrado una vida, debido a que la vivienda resultó totalmente anegada (más antecedentes en Diario El Pingüino).