
El comité ejecutivo de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) se reunió ayer de manera extraordinaria para analizar los hechos de violencia en la Región de la Araucanía, específicamente el caso del atentado incendiario que terminó con la vida del matrimonio Luchsinger en Vilcún. El comité ejecutivo de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) se reunió ayer de manera extraordinaria para analizar los hechos de violencia en la Región de la Araucanía, específicamente el caso del atentado incendiario que terminó con la vida del matrimonio Luchsinger en Vilcún. Al respecto, el presidente de la CPC Lorenzo Constans señaló que “nos hemos reunido de forma extraordinaria para lamentar y solidarizar con las víctimas del hecho sucedido ayer en la Región de la Araucanía”. “Un hecho como este (la muerte del matrimonio Luchsinger en Vilcún) debe ser condenado de manera categórica, los hechos de violencia extrema atentan contra el estado de derecho y por lo tanto nosotros como CPC lo condenamos. Este es un atentado contra el derecho humano más básico que es el derecho a la vida”, señaló. Constans planteó “que la institucionalidad debe actuar de manera coordinada, sin perder tiempo y con el máximo rigor que permite la ley”. El representante del gran empresariado alertó que el conflicto en la Araucanía “es una situación que afecta a toda la sociedad y pensamos que los que resulten responsables deben juzgados de manera adecuada, de acuerdo a derecho y dando una señal clara de eficiencia en el fallo”. Asimismo, señaló que la muerte del agricultor de la zona “es un situación delicada que se ha transformado en una noticia mundialmente conocida y eso nos preocupa como país”.