Los ex empleados se reunieron con la ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, con el objetivo de pedir ayuda para recuperar sus puestos laborales. La ministra del Trabajo y Previsión Social, Evelyn Matthei; junto al subsecretario del Trabajo, Bruno Baranda; y al diputado Giovanni Calderón, recibieron ayer a un grupo de dirigentes y ex trabajadores de la planta de Agrosuper en Freirina, que fue cerrada el pasado 10 de diciembre.
Los ex trabajadores mostraron su lamento por la pérdida de puestos de trabajo de calidad, y señalaron estar avanzando en la posibilidad de realizar un plebiscito en Freirina, que determine el real apoyo o rechazo a la iniciativa en la zona.
“Este Gobierno no va a hacer lo que se hizo en 2005, cuando se dio una aprobación en la que no hubo preocupación alguna por el desempleo. Este Gobierno está a favor del empleo y el emprendimiento pero con respeto irrestricto al medioambiente y los derechos de los trabajadores”, dijo la ministra Matthei.
Agregó que “si Agrosuper se queda o no en Freirina, depende de si está dispuesta a invertir US$ 100 millones, pero ¿quién va a estar dispuesto a invertir si tiene al alcalde de Freirina y a otro grupo armado con bombas molotov exigiendo a toda costa que se vaya la empresa?”.
Consultada sobre la posibilidad de hacer un plebiscito en Freirina para determinar la viabilidad del proyecto, la ministra Matthei señaló que “hemos acogido a estos trabajadores que han quedado sin empleo. No nos compete señalar si puede o no haber un plebiscito, pero cuando un grupo grande de ciudadanos tiene problemas, tenemos que escucharlos y ayudarlos, poniéndolos en contacto con los ministerios o instancias correspondientes”.
Por su parte, la dirigente sindical Sofía Pérez, señaló que “estamos pidiendo ayuda para recuperar nuestros puestos de trabajo. Los alcaldes de la zona nos han ofendido y nos han ofrecido irnos a trabajar a la papa y el tomate, cuando hace unas semanas teníamos buenos empleos, que perdimos por la oposición de estos alcaldes al proyecto”.