
El Mandatario destacó que junto a esta nueva estación, “el Gobierno ha tomado las medidas para hacer de Punta Arenas y de Puerto Williams, la puerta de entrada del mundo al Continente Antártico. También, para fortalecer el turismo y la investigación científica antártica en este continente, que tiene las reservas de agua dulce más grandes del mundo, que tiene paisajes y un medioambiente absolutamente extraordinarios y únicos en el mundo”.
La nueva base permitirá a Chile ejercer presencia soberana en una de las pocas pistas de hielo azul del continente, además de constituirse en uno de los tres únicos países que tienen actividades permanentes o semi-permanentes al sur del paralelo 80º de latitud sur (los otros son Estados Unidos con la Base Amundsen-Scott, situada en el Polo Sur, y China con la Base Kunlun), así como realizar labor científica en el interior del continente en un área de especial valor para la glaciología y meteorología.