Fiscal Felipe Aguirre dijo que junto al trabajo de la Bricrim, de la Policía de Investigaciones, espera aclarar lo sucedido el domingo 13 de enero. Un avance sustancial registra la investigación que lidera el fiscal jefe de Punta Arenas, Felipe Aguirre, tendiente a aclarar los serios incidentes ocurridos al interior de la iglesia Catedral, el domingo 13 de enero. Ese día, producto de la aparición de unos 40 perros muertos, una turba ingresó al templo católico, cometiendo serios incidentes, calificados como una “profanación”.
El obispo Bastres denunció estos hechos a la fiscalía y la investigación recayó en manos de Felipe Aguirre Pallavicini. El cometido de los antisociales dejó pérdidas millonarias, porque rompieron el altar, arrojaron al suelo adornos y elementos utilizados por los sacerdotes para la misa; destruyeron un vidrio más otros actos vandálicos, lo que pasó a configurar un delito de “profanación de un lugar de culto”.
Días después el abogado del obispado, Francisco Cárdenas Mansilla, presentó una querella criminal. En el escrito indica que “conforme a lo difundido en los medios de comunicación, las personas que realizaron y ejecutaron los hechos lo hicieron previa reunión en la Plaza de Armas, y a la que habrían sido convocadas por las redes sociales para protestar o reclamar por la muerte de decenas de perros ocurrida en horas previas o el día anterior. Desde allí, alguien o algunos alentaron a las personas para ingresar a la iglesia Catedral, a modo de “funa”, por estimar que el obispo había propiciado la matanza de los perros, conclusión esta última que es absolutamente alejada de la verdad y del real sentido de su visión del tema”.
Investigación
Transcurridos varios días desde que el fiscal Aguirre inició la investigación, respondió que las diligencias, encargadas a la Brigada Criminalística de la Policía de Investigaciones, van muy bien encaminadas. Sobre todo porque la PDI le informó que recopilaron parte de las imágenes captadas por los medios de comunicación, “y que por lo que me señalaron hay varias personas que se pueden identificar realizando ciertas acciones constitutivas de delito. Lo que para nosotros es una avance porque generalmente, cuando se cometen hechos de este tipo, en masas o grupos, obviamente lo primero que se pretende es desligar responsabilidades”.
Confirmó, además que se entrevistó con monseñor Bastres, “diligencia que fue muy fructífera porque pudimos recabar, de primera fuente, su visión de los hechos y de cómo ese día se interrumpió el servicio religioso”. El encuentro se concretó en dependencias de la fiscalía de Punta Arenas, hasta donde llegó el pastor.
Felipe Aguirre espera aclarar los incidentes de ese domingo, parte de lo cual se verá reflejado en el informe que le entregue la policía, unido a otras declaraciones y diligencias que vayan surgiendo durante la investigación.