El inmueble está lejos del esplendor que mantuvo hace décadas. Hoy presenta graves deterioros y es lugar asiduo para jóvenes y personas en situación de calle que llegan a beber y prender fuego. La varias veces quemada “Casa de los Generales”, propiedad que en sus mejores tiempos fue el domicilio de los altos mandos de Carabineros, ha sido denunciada en reiteradas ocasiones por vecinos de la zona, por convertirse en un foco de delincuencia y drogadicción, y lugar de morada de personas en situación de calle.
Pingüino Multimedia visitó los alrededores de la residencia, emplazada en un amplio recinto en la intersección de las calles Arauco con República, donde se puede apreciar al instante restos de basura, especialmente de botellas, cajas de vino y cervezas, así como el forado de una de sus murallas que sirve de entrada al lugar.
De acuerdo a fuentes de Carabineros, esta propiedad fue vendida a terceros el año pasado. Sin embargo, y según denuncian personas de casas colindantes, no se ha observado ningún tipo de obras o trabajos para efectuar un cierre al recinto o para mejorar sus instalaciones.
Luis Agurto, vecino del sector, detalla que se ve movimiento normalmente “en las noches o en las madrugadas, cuando llegan jóvenes a beber ahí y rompen todo, pintan, sólo por hacer daño. Desconocemos la situación de la casa en estos momentos, o sea si la van a reparar o la van a dejar así, pero consideramos que es un foco de extraños que se meten a tomar y todo eso: es un riesgo para los vecinos también”, manifiesta.
Un tema que preocupa, si se piensa que los “visitantes” serían los mismos responsables de los nuevos focos de incendio que se han originado en el lugar y que amenazan a las viviendas aledañas.
De acuerdo a otra vecina, quien no quiso identificarse, indigentes de otra casa abandonada del sector, que fue demolida hace algunos meses, estarían frecuentando la ex Casa de los Generales, no sólo para consumir estupefacientes, sino además, para mantener relaciones sexuales.
Inspección
Desde el Departamento de Inspecciones de la Municipalidad de Punta Arenas señalaron que, en caso de que la casa esté abandonada, es decir que pueda entrar libremente gente al recinto, lo que corresponde es que los vecinos llamen al organismo, al fono 200 377, el cual deberá enviar a un inspector que compruebe situación y notifique a los propietarios, quienes deberán efectuar el cierre del recinto en un plazo inmediato. En caso de que los dueños del inmueble no lo hagan dentro de las 24 horas, se imparte una multa por parte del juzgado de policía local, con un monto mínimo de una UTM, según lo que indique el juez.
Sobre esta casa en particular, el departamento indica que ya habían recibido denuncias de vecinos en agosto del año pasado y los propietarios procedieron a cerrar el lugar, por lo que este nuevo forado sería obra también de vándalos. Una situación lamentable para quienes residen y transitan en la zona, y para aquellos que tuvieron la oportunidad de conocer la casona en mejores condiciones que las actuales.