El abogado Jaime Obando dijo que “a la fecha ninguna de las personas, de las cuales se solicitó esta extradición, ha sido ubicada”. El martes recién pasado la Corte de Apelaciones acogió la solicitud del Ministerio Público de extraditar a los dos prófugos de la justicia, Sebastián Curiche Vergara e Israel Villarroel Alvarado, por dos homicidios ocurridos los años 2004 y 2005 en Punta Arenas, quienes fueron ubicados en la ciudad de Mendoza, Argentina.
El abogado defensor, Jaime Obando, señaló que: “A la fecha ninguna de estas personas, de las cuales se solicitó esta extradición, ha sido ubicada. Nunca ha habido ningún detenido bajo ninguna figura. Bajo ese punto de vista mantenemos incertidumbre de quién van a traer si no hay nadie habido”.
Obando agregó que tras las informaciones que señalan que los condenados Sebastián Curiche e Israel Villarroel se encontrarían en Bolivia, indicó que la solicitud de extradición es válida sólo en Argentina. “Si estas personas son encontradas en otro lugar que no sea Argentina, el Ministerio Público deberá hacer las peticiones que estime, porque esta solicitud es para hacerse efectiva en Argentina y no en otro país”.
Respecto a los años que han transcurrido desde que fueron condenados, el abogado dijo que al encontrarse en otro país el tiempo de prescripión de las causas aumentan al doble. “Hay que tomar en cuenta que cuando una persona sale del país y hay constancia, el plazo de prescripión es el doble. Para que eso se logre (la prescripción) debe pasar más tiempo, en este caso son veinte años”.
Los dos condenados por homicidio fueron vistos por última vez en el Circo Rodas, en Mendoza, Argentina, cuando se desempeñaban como acróbatas. Una vez conocida la solicitud de extradición desaparecieron desde el lugar donde trabajaban.