
La Corte Suprema ya ha resuelto que este contrato estuvo fuera de la ley y que por tanto se deberá retrotraer la licitación, lo que significaría millonarias pérdidas para el municipio, además de los costos que ha tenido el cancelar un estudio jurídico de Santiago para la defensa de este caso.
Así la situación, es millonaria la suma de dinero que deberá desembolsar el municipio de la capital magallánica, luego de la adjudicación a la empresa Servitrans la concesión del servicio de recolección y transporte de residuos sólidos domiciliarios.
La adjudicación a Servitrans se realizó a pesar de estar esta empresa en el quinto lugar en el puntaje de las propuestas, y además de considerar un costo para la municipalidad de 30 millones de pesos más que la oferta que obtuvo el primer puntaje.
El alcalde de entonces, Vladimiro Mimica, justificó la decisión señalando que esta era la propuesta más apropiada y que además ofrecía otros servicios.
Y efectivamente, a pesar que el indicar “servicios extras” estaba fuera de las bases, Servitrans se comprometió a entregar los siguientes servicios adicionales: en primer término Servitrans Servicios y Comercio S.A. ofreció barrer el centro de la ciudad de 40 kilómetros lineales tres veces por semana, como así también retirar los residuos en un horario distinto al programado para el retiro de la basura domiciliaria.
Otro compromiso indicaba que se realizaría un programa de educación y difusión sobre temas ambientales, promoviendo la defensa del entorno urbano y rural, socializando conductas responsables en el tratamiento integral de deshechos sólidos. En la oferta se agregó en este punto que estas acciones se realizarían con comunidades educativas y usuarios del servicio en general. De la misma forma existía un compromiso en cuanto a modificar los hábitos para efectuar un manejo de residuos con responsabilidad.
Otro “valor agregado” de la propuesta de Servitrans indicaba que se minimizarían los residuos con la modificación de costumbres de los usuarios.
Educación ambiental para los colegios promoviendo el adecuado manejo de los deshechos sólidos para mejorar el aseo en los establecimientos educacionales.
Se capacitaría a los usuarios acerca del correcto manejo de contenedores de recepción de residuos que existen cerca de las viviendas.
Se ofrecieron campañas masivas a la comunidad a través de diferentes actividades encaminadas a optimizar la prestación del servicio. Estas campañas se realizarían desde el inicio del contrato.
La empresa aseguraba además un sistema de monitoreo de operaciones en el que cada vehículo contaría con G.P.S. (sistema de posicionamiento global) para lo cual Servitrans contrataría los servicios de una empresa especializada en el suministro, instalación, configuración y puesta en marcha del sistema. Esto sería en la totalidad de los vehículos de operación, con la implementación de un centro de control en la base de operaciones.
Ya han pasado tres años desde que Servitrans Servicios y Comercio S.A. está prestando el servicio de recolección de residuos sólidos domiciliarios en Punta Arenas y al parecer los compromisos antes descritos si se han cumplido se ha hecho de manera muy “silenciosa”, puesto que no existen antecedentes públicos que se hayan realizado campañas periódicas y sistemáticas a la comunidad.
Es digno preguntarse también si en los colegios desde que esta empresa inició su trabajo, ha habido cambios en las conductas para el manejo de residuos. O si se barren las calles céntricas con la periodicidad ofrecida.
Llama la atención que estos ofrecimientos hayan justificado la adjudicación a esta empresa cuando además de estar fuera de bases no se especifica aspectos cualitativos ni cuantitativos. ¿Como el municipio entonces podrá evaluar la prestación de estos servicios adicionales?.