La primera labor de búsqueda se realizó la semana pasada, cuando la Gobernación Marítima de Punta Arenas recibió un llamado telefónico a la línea de emergencias marítimas 137, informando que se habrían encontrado restos de torpedos en el sector de la desembocadura del Río Chabunco, ubicado en el kilómetro 18 al costado de la Ruta 9 Norte.
En esos momentos se dispuso el zarpe de la Lancha de Servicio General (LSG) “Punta Arenas”, con el objeto de verificar la información con la ayuda de los buzos de la Partida de Salvataje.
Al finalizar las labores de buceo, se determinó que en el área se encontraban sumergidos elementos metálicos, con forma cónica y visiblemente deteriorado, de una data aproximada de 20 años, según lo explicó el teniente Pedro Montes. “Estos artefactos que se encontraron estaban a 10 metros de profundidad, teniendo 3.50 metros de largo y 1.60 de ancho. En un principio se vio que tenían características de bomba, misil o torpedo, motivo por el cual el día que se recibió la denuncia se envió una patrullera con personal de buzo calificado para manejar cualquier tipo de explosivos bajo el agua. En ese lugar se encontraron los artefactos, los cuales deben llevar en el lugar entre 10 a 20 años”.
Tras la primera inspección, personal de la Armada retornó al lugar el domingo para determinar la procedencia de estos tres artefactos encontrados por pescadores artesanales. El teniente Montes explicó que “en una segunda instancia de buceo realizada se pudo determinar que era un material compuesto de fibra de carbono, la cual es materia de investigación en este momento. Por esto se comenzó a indagar la procedencia y a quién pertenecen estos elementos, para que esa persona posteriormente los saque del agua”.
El teniente de la Armada señaló que los artefactos no corresponderían a material bélico. “Por la magnitud de los elementos, que son bastante anchos, descartaría que sea algún tipo de torpedo o algún tipo de misil, ya que no son de estas características”.
La labor de buceo realizada el domingo, con una duración cercana a una hora, se desarrolló bajo favorables condiciones meteorológicas y de mar, las que contribuyeron a visualizar los artefactos sumergidos.
Con los antecedentes, personal de la Armada llamó a los pescadores de la zona a realizar sus labores de extracción con tranquilidad. “La verdad que no presentan ningún riesgo para las faenas de buceo que ellos realizan y en estos momentos la autoridad marítima se encuentra en curso con la investigación, para determinar el dueño de estos elementos. No se descarta que pertenezcan a alguna rama de las Fuerzas Armadas. Todo está en investigación, pero no presenta ningún peligro para la navegación y las labores de buceo que se realizan ahí, ya que no es un artefacto militar explosivo”, aseguró Montes.
Pescadores
Por su parte, Ricardo Millán, buzo mariscador que junto a otros pescadores realizaron el hallazgo y denunciaron el hecho, señaló que continuará insistiendo en que saquen los artefactos desde el lugar. “Lo único que puedo decir es que si están seguros que no representan peligro igual los saquen del lugar y hagan las pericias afuera. Si dicen que son artefactos antiguos, entonces se puede pensar que eran de propiedad de los ingleses para el conflicto con Argentina en el tiempo de Las Malvinas”.
Millán agregó que a pesar de lo señalado por la Armada, los pescadores del sector piensan que deben ser retirados, “porque pueden ser radioactivos y provocar algún tipo de contaminación. No puede mantenerse en el área un objeto no identificado que no se sabe lo que es”.
Agregó que insistirán con el tema, entregando los antecedentes a los dirigentes de la pesca artesanal. “Lo ideal es que los dirigentes expongan este tema a la Gobernación Marítima para que podamos trabajar tranquilos. No es sólo un tema de nosotros, las corrientes pueden trasladarlos a otro lugar”, enfatizó Millán.