
Los diputados franceses adoptaron ayer de forma definitiva el texto que legaliza los matrimonios entre personas del mismo sexo y que permite la adopción conjunta de niños, con los votos a favor de la izquierda y en contra de la oposición conservadora. En la segunda y última lectura del texto en la Asamblea Legislativa, 331 diputados votaron en favor del texto y 225 en contra. El voto en la Asamblea Nacional, donde los socialistas, gozan de una confortable mayoría, convirtió a Francia en el 14º país que legaliza el matrimonio homosexual. “Pienso ya en la alegría, en la felicidad de todas esas parejas de homosexuales, en los niños que están educando, porque van a obtener por fin una protección y los mismos derechos que los demás”, declaró David Assouline, portavoz del Partido Socialista, poco antes del voto.