Alejandro Kusanovic, presidente de la CPC Magallanes, prevé que la situación empeore de aquí a fin de año. Sin embargo, aclara que es un proceso cíclico. En alerta se mantienen los empresarios de Magallanes por la baja histórica que afectó al precio del peso argentino, que esta semana llegó a bordear los $ 40, llegando a valer la mitad en comparación con los valores del año pasado.
A esto se suman las restricciones que estableció el Gobierno transandino a las importaciones, lo que generó preocupación entre los empresarios que temen una baja importante en la llegada de turistas de esa nacionalidad a Magallanes.
Alejandro Kusanovic, presidente de la CPC Magallanes comentó que “éste es un tema que nos puede llegar a afectar en la cantidad de argentinos que llegan a comprar a Zona Franca, al mall y al comercio en general, este es un problema que se repite cada 10 u 11 años, la última vez que se produjo una devaluación fue en diciembre del 2001, por lo tanto estamos nuevamente en una época y va afectar en el comercio. Yo creo que este tema, de aquí a fin de año, va a tener una expresión fuerte y hay que estar preparados para lo que viene”.
Señaló que con esto a los magallánicos les conviene ir de vacaciones a Argentina, “pero el comercio se va a ver afectado porque los transandinos van a llegar cada vez menos a comprar”.
Por su parte, Marcos Ivelic, presidente de la Cámara de Comercio, explicó que el peso argentino está tan depreciado que hay algunos países que ya no lo aceptan. “Imagina que lo recibo a 70 pesos y mañana cuando lo quiero vender está a $ 50 o $ 40”.
Agregó que uno de los países que sigue recibiendo esta moneda es Chile, porque el intercambio de veraneantes con Argentina facilitan las transacciones monetarias. “Las agencias reciben los pesos argentinos y se los venden a los chilenos para que puedan ir a veranear, pero eso dura sólo la temporada alta. Yo creo que esa es una de las causas que explica que el peso está botado”, explicó Marcos Ivelic.
Según un informe de la consultora Economía & Regiones, el tipo de cambio nominal se devaluó 67% desde el 2007 y 82% desde 2003, a un ritmo del 20% anual en los últimos meses,
“Esta menor competitividad implica que las importaciones se abaratan y los bienes argentinos comienzan a ser reemplazados por productos importados aumentando la salida de dólares del país”, señaló la consultora, en un medio nacional.
“En este marco, disminuyen las exportaciones, la producción doméstica y la generación de empleo”, advirtió E&R en un informe.
En tanto que los usuarios de la Zona Franca, aseguran que a pesar de la caída histórica que ha tenido el precio del peso argentino, a los visitantes de ese país aún les resulta conveniente comprar en el recinto.
Silvia Roddin, propietaria de los locales 112 y 113 de línea blanca y electrónica comentó que los argentinos generalmente compran con tarjeta ya que el banco les da un precio mejor (el que entrega el Gobierno de manera oficial).
Por su parte, Sebastián Ibinarriaga Barría, del local 132 (Pacífico Digital) sostiene que “por los problemas que ellos tienen en Argentina ven más fácil comprar acá, en un país extranjero y comprar cosas a un precio más barato. Además pueden acceder a una mayor cantidad de productos especialmente en Zona Franca”.
Reconoce que “en invierno baja, pero en nuestros locales la mayoría de las ventas, el 70% son transandinos, entonces aún así va a haber una masa de argentinos comprando”.