
Aseguran que su sede vecinal no es utilizada para fiestas, desestimando que la agresión haya ocurrido en el inmueble. “Estamos preocupados por los dichos que señalan que al interior de la sede vecinal se han producido riñas y agresiones. Nosotros no prestamos el local para fiestas, ya que cuando nuestros jóvenes la utilizan lo más tarde que la cerramos es a la 22 horas. Nunca se ha arrendado a las tres de la madrugada”, enfatizó la presidenta.
Agregó que su sector durante mucho tiempo ha sido estigmatizado por diferentes actos vandálicos, situación que ha cambiado. “En la sede vecinal hemos hecho diferentes actividades para que los jóvenes puedan distraerse. No negamos que existen grupos de pandillas, pero estamos permanentemente con los jóvenes. Somos gente trabajadora y niños que quieren que su población no tenga el renombre que le ha dado”.