Lo que hace años era el proyecto de un Centro Cultural en Punta Arenas, hoy es una realidad. Así se conoció durante la visita que realizaron la directora regional del Consejo de la Cultura y las Artes, Paola Vezzani, junto al jefe nacional de Infraestructura de la institución, José Gabriel Johnson, asesores del área, y los equipos de Obras y de Gestión Cultural del municipio, con el fin de constatar en terreno los avances de la construcción del Centro Cultural de Punta Arenas.
Primera etapa
Johnson, señaló su interés de que la primera etapa, que incluye 1.050,9 metros cuadrados, esté en funcionamiento en septiembre. Dicha fase se concreta gracias al aporte del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, ascendente a 925 millones de pesos (900 para la construcción y 25 el diseño arquitectónico).
El edificio considera una sala taller y de vestuario en el nivel subterráneo, taller de música, sala de exposiciones, áreas operativas, y servicios higiénicos en el primer piso; y salas de artes, talleres y oficinas en el segundo.
La segunda parte del Centro Cultural contempla 507 metros cuadrados, el cual se edificará con recursos del Gobierno Regional. Considera una sala de artes escénicas, con capacidad para 220 espectadores; espacios para servicios y bodegas, más equipamiento de sonido e iluminación.
Con posterioridad al recorrido, la comitiva del Consejo de la Cultura y las Artes se reunió con el Alcalde Emilio Boccazzi en su despacho, con el fin de solicitar su compromiso para que en el mes de septiembre comience a funcionar la primera etapa. Boccazzi indicó que a fines de agosto dicha fase debiera estar concluida, “por lo que entre septiembre y diciembre habrá una marcha blanca del recinto”.
Igualmente, el jefe comunal explicó que paralelamente se está trabajando en la conformación de una Corporación Municipal Cultural junto con un plan de gestión, que considerará en su labor al Centro Cultural, así como al Teatro y Biblioteca Municipal.
Finalmente, el alcalde informó que se realizará un levantamiento con el equipamiento que se tiene y el que falta, para colocar en funcionamiento la primera etapa del recinto.