
Una tercera pasajera, que llevaba puesto su cinturón de seguridad, resultó con lesiones leves. Tres lesionados de diversa consideración fue el saldo de un violento accidente de tránsito registrado ayer durante la madrugada, en el sector norte de Punta Arenas.
El choque ocurrió poco antes de las tres de la madrugada, cuando el conductor I.G.M.P., de 17 años, se desplazaba en un vehículo Toyota Yaris por calle Hornillas, en dirección hacia Avenida España.
Por razones que se investigan, el joven perdió el control del móvil a la altura de calle José Davet, impactando contra la solera. Luego de realizar un trompo, la máquina golpeó un poste y terminó chocando un bus escolar, estacionado frente al número 0246 de calle Hornillas.
Dos de los ocupantes salieron eyectados del móvil, mientras que una joven quedó al interior del vehículo, tal como lo indicó el comisario de Punta Arenas, mayor Christian Gutiérrez: “Resultaron dos personas lesionadas de gravedad, mientras que una joven acompañante, tuvo lesiones de menor consideración debido a que iba con su cinturón de seguridad puesto. El conductor menor de edad circulaba sin licencia de conducir y, además, en estado de ebriedad”.
En el lugar, personal del Cuadrante 2 de Carabineros adoptó el procedimiento, percatándose además que el joven no solamente no portaba licencia de conducir, sino que el móvil mantenía la revisión técnica vencida. A eso de las 6.15 horas el vehículo fue trasladado por una grúa hasta los corrales municipales.
Lesionados
Luego del accidente, personal del Sistema de Atención Médica de Urgencia (SAMU) se trasladó al lugar, donde inmovilizó a los lesionados y los trasladó hasta el Hospital Clínico de Magallanes.
La enfermera Soledad Andrade detalló que “fueron tres lesionados de diversa consideración, dos de ellos fueron ingresados para su evaluación por el médico de turno”.
Tras su evaluación, el conductor de 17 años resultó con una contusión craneana y policontuso de carácter leve. El segundo pasajero que terminó fuera del vehículo, identificado como Víctor Vargas Cayún, de 18 años, fue el que sufrió las heridas más graves. Por este motivo, quedó internado en la Unidad de Tratamientos Intensivos (UTI), del recinto asistencial producto de un TEC grave, además de pérdida de piezas dentales.
Por su parte, la joven de 18 años, identificada como Macarena Boccazzi Molkenbuhr, única pasajera que utilizaba el cinturón de seguridad, sólo sufrió lesiones leves.
SIAT
Por disposición del fiscal de turno, al lugar del choque concurrió personal de la Sección de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT). El capitán de Carabineros, Felipe Ávila, jefe de la sección , comentó que en primera instancia las causas basales del accidente fueron producto de la velocidad e ingesta de alcohol. “Este conductor menor de edad se desplazaba por calle Hornillas. Preliminarmente se pudo obtener que hubo un factor de velocidad mayor a la razonable y prudente, además de conducir en estado de intemperancia”.
Ávila agregó que este tipo de accidentes son producidos por la imprudencia de los conductores. “Éstas son las consecuencias que existen de las conductas riesgosas, temerarias y el actuar negligente de los padres de este joven, que permiten que transite en estas condiciones, donde no sólo ocasiona daños a su propio vehículo y lesiones, sino que afecta a terceras personas”.
El jefe de la SIAT en Punta Arenas, indicó que a la hora del accidente no había presencia de escarcha en el lugar. “En el tramo no detectamos mayores inconvenientes en la calzada, si bien es cierto estaba húmeda y con condiciones climáticas desfavorables con temperaturas bajas, pero esto no justifica y tampoco tiene que ver con la causa basal del accidente. Nuestras primeras indagaciones dan cuenta de una pérdida de control del vehículo que provoca un ronceo, el que ocasiona el impacto, esas son las primeras hipótesis como SIAT”.
El conductor quedó en calidad de imputado por la responsabilidad en las lesiones y los daños en el vehículo estacionado.