
La Policía de Investigaciones logró la detención de ambos, después de que el jefe de operaciones de la tienda Ripley los denunciara por sustraer prendas de vestir, las que agergadas a otras que sacaron desde Falabella sumaron un millón de pesos.
La fiscal Acuña dijo que primero sustrajeron ropa en Falabella, el miércoles, y después, el viernes, ingresaron a Ripley, donde el robo quedó registrado en las cámaras de seguridad. “Entraban a la tienda y metían la ropa en las llamadas bolsas biónicas, sin retirar los dispositivos de seguridad”, señaló.
Estas bolsas están forradas en su interior con aluminio, lo que impide el accionar de las alarmas de seguridad. Una modalidad relativamente nueva e ingeniosa que utilizan...
Más información en Diario El Pingüino.-