
En el primer juego había ganado Sokol 57-50 y en el segundo partido el triunfo fue para las universitarias 75-48.
El papel de favoritas pertenecía al equipo que dirige Danilo Bahamóndez por contar con un plantel más largo y de basta experiencia en relación a su adversario, sin embargo, las sokolinas pusieron alma y corazón para doblegar a UMAG en un final infartante por 65-61.
Las dirigidas de Mario Díaz a contar del segundo período lograron mantener una ventaja de 10 puntos sobre UMAG, que a pesar del esfuerzo por sobrepasar a las croatas no lograban su cometido.
El primer período finalizó 12-10 en favor de Sokol y la primera etapa del partido concluía 35-23, siempre ganando las campeonas.
Al cierre del tercer período, el marcador estaba 49-39 por lo que se presumía que en el último cuarto UMAG saldría con todo en procura de revertir el resultado, merced a que contaba con jugadoras que llegaban más enteras físicamente a esta parte del juego, producto de la rotación que generaba el técnico Bahamóndez.
No obstante, Sokol, que tiene un equipo reducido, logró, a través del infatigable trabajo de sus jugadoras y de una defensa efectiva que le cerraba el aro a las universitarias, no sentir el agotamiento de la lucha cestera a pesar que cuando restaban pocos minutos para que el encuentro finalice, UMAG estuvo cerca de dar vuelta el partido aprovechando fundamentalmente algunos errores producto del cansancio de algunas jugadoras sokolinas que al final sacaron fuerza para quedarse justicieramente con el título del torneo de apertura.