A partir del 27 de agosto, todos los alumnos de 8° básico están siendo vacunados, como parte del Programa Nacional de Inmunizaciones, contra el coqueluche o tos convulsiva. Así lo informó el subsecretario de Salud Pública, Jorge Díaz, quien detalló que si bien la vacuna se coloca a los niños a los 2, 4, 6 y 18 meses (y luego se les hace un refuerzo a los 6 años) se estima que su inmunidad puede durar 10 años después de recibida la última dosis.

Por ello, dijo, los adolescentes pierden la inmunidad que adquirieron en su infancia.
El coqueluche es una infección bacteriana que afecta el sistema respiratorio.

Sus principales síntomas son ataques de tos, silbido en el pecho al inspirar (después de toser) y vómitos por el esfuerzo al toser.

Su contagio es persona a persona, mediante las gotitas de secreciones respiratorias del individuo infectado, y su período de incubación (lapso entre el contagio y los síntomas) es de 7 a 10 días.

Desde el 2010 se ha registrado un aumento de casos en Europa, Estados Unidos, Canadá y América Latina. En Chile se produjo un alza en el índice de casos el año pasado (fallecieron 13 personas), afectando en mayor medida a las regiones VIII, V, VI y Metropolitana.