Una mujer que pasó quince días en el fondo de un pozo abandonado en China, alimentándose con espigas de maíz y bebiendo agua de lluvia, fue hallada con vida, informó ayer la prensa local. Su Qixiu, de 38 años, fue encontrada en el fondo de un pozo de un metro de diámetro y de cuatro metros de profundidad.
Las paredes lisas del pozo impedían cualquier intento de escalar hacia la salida, según el Diario de Dahe, un periódico de la provincia de Henan (centro).
La mujer estaba “extremadamente delgada”, según el diario, que cita a uno de los bomberos que la rescató.