La dirigenta y presidenta del Comité de Aguas, Hilda Miranda, en tanto, valoró la disposición de la máxima autoridad regional y enfatizó que “su principal problema es la insalubridad”. Un recorrido por el sector de Pampa Redonda realizó ayer a partir de las 16 horas el intendente Claudio Radonich junto al gobernador Segundo Álvarez y el seremi de Bienes Nacionales, Alfonso Roux, para conocer en terreno las necesidades de los vecinos.
En este marco se trasladó junto a dirigentes, encabezados por Hilda Miranda, presidenta del Comité de Aguas, al cerro donde se encuentran instalados pozos con el suministro, de los cuales pese a estar contaminados, dado que ni siquiera tienen tapas, beben algunos vecinos en su desesperación de no contar con agua potable.
La máxima autoridad regional reconoció que “hay un tema pendiente hace muchos años en materia de caminos, alcantarillado y agua potable”, estableciendo que estos pozos “no cumplen con ningún tipo de higiene y algunos la beben, por lo que éste es un tema de urgencia que se tomará de esta manera, pero con soluciones concretas, porque estamos hablando de un elemento vital que no tiene ningún tratamiento con pozos que están sin cubierta”.
Agregó que por ende se reunirá con la Municipalidad de Punta Arenas, el Ministerio de Obras Públicas y los entes relacionados de Gobierno, para dar una pronta solución a sus demandas.
“Por primera vez en 30 años este Gobierno se hace cargo de trabajar con las familias”, agregó, considerando el estudio que se está llevando a cabo con 600 hogares para regularizar su situación.
Para la dirigenta de Pampa Redonda, Grisolia Gómez, “ha habido una voluntad política que no existió años anteriores y ahora tenemos la regularización de caminos y propiedades, y por eso estamos muy contentos y conformes con lo que está ocurriendo”, enfatizó.
Hilda Miranda, por su parte, quien guió a las autoridades hasta donde se encuentran los pozos, manifestó que “tenemos muchos problemas con el agua, principalmente por su insalubridad”, comentando que los derechos los tiene la dirigenta Gómez, siendo su trabajo administrarlas, para lo cual entre los vecinos pagan una cuota mensual de $ 2.000, debiéndose reunir además
$ 20.000 para cancelarle a un trabajador para dar el agua. “Por ese dinero tiene que hacerlo día por medio y se hace muy complicado, sobre todo en invierno, y por esta razón le pido ayuda al intendente para que nos colabore con las tapas de los pozos por último, para tener algo más higiénico”, aseveró.