
Las tres víctimas -una malasia de 69 años, una irlandesa de 57 y una británica de 30 años- están “muy traumatizadas” y fueron rescatadas gracias a la intervención en octubre de la organización benéfica Freedom Charity, indicó Scotland Yard.
Freedom Charity se puso en contacto con la Policía tras recibir una llamada de una mujer que dijo haber estado retenida en contra de su voluntad durante más de 30 años, añadió la Policía Metropolitana.
Tras iniciar una investigación, la Policía pudo localizar la vivienda y, después de unas “negociaciones sensibles” llevadas a cabo por la organización benéfica, las tres mujeres fueron rescatadas, y los responsables del secuestro -un hombre y una mujer, ambos de 67 años- fueron detenidos.
“Aplaudimos las acciones de Freedom Charity y trabajamos juntos para apoyar a estas víctimas, que parecen haber permanecido retenidas durante más de treinta años. Hemos puesto en marcha una amplia investigación para establecer los hechos en torno a estas serias acusaciones”, dijo el inspector Kevin Hyland, de la Unidad de Tráfico Humano de Scotland Yard.
La organización benéfica Freedom Charity, que ayuda a las personas víctimas de matrimonios forzosos o violencia desatada en casos de honor, recibió el mes pasado una llamada de una de las mujeres que había visto un programa de televisión sobre matrimonios forzosos. “Un documental de televisión fue el catalizador que llevó a una de las víctimas a llamar para pedir la ayuda que llevó a su rescate”, ha señalado su presidenta Aneeta Prem, a la cadena Sky.
Prem ha explicado que el rescate se produjo tras negociar con los dos detenidos una semana después de las primeras llamadas, aunque no especificó las fechas concretas de ambos hechos. “Tenían la sensación de que estaban en grave peligro”, explicó. Las tres, que se encontraban “muy afectadas por su experiencia” y han sido llevadas a un lugar seguro, habían sido utilizadas como esclavas domésticas, pero en principio se descarta que su cautiverio tuviera motivos sexuales. “No me han dicho nada de eso”, aclaró.
Largo cautiverio
El caso no ha dejado indiferente a la opinión pública: se trata del secuestro más largo de la historia, lo que ha hecho reflotar otros episodios de similares características, como el cautiverio de la austríaca Natasha Kampusch, retenida por un ingeniero durante ocho años, el denominado “monstruo de Amstetten”, Josef Fritzl (también en Austria), quien mantuvo encerrada durante 24 años a su hija Elizabeth, o el recinte caso de las tres víctimas de Cleveland, Amanda Berry, Gina DeJesus y Michelle Knight, que permanecieron secuestradas por 10 años en manos del puertorriqueño, Ariel Castro. Este último se suicidó mientras cumplía su pena de cárcel.