
La colisión se produjo cuando un taxi de la empresa Ona, que transitaba por Camilo Henríquez, de playa a cerro, fue impactado violentamente por una camioneta Great Wall de color gris, que lo hacía por Lastarria, de sur a norte.
Según la policía, el conductor de este último vehículo se encontraba en evidente estado de ebriedad, por lo que fue detenido y posteriormente trasladado a la asistencia pública donde se le practicó el examen de alcoholemia.
En tanto, el conductor del taxi debió ser atendido por personal del SAMU y de la Unidad de Rescate de Bomberos, tras lo cual fue evacuado al Servicio de Urgencia del Hospital Clínico de Magallanes.
Los daños en ambos vehículos fueron cuantiosos.
Además, un automóvil Chevrolet Opala, que se encontraba estacionado sobre la vereda, sufrió daños tras ser alcanzado por la camioneta.
Pese a la modificación que sufrió la Ley 20.580, conocida como Tolerancia Cero, que rige desde marzo del año pasado, la actitud de los conductores no parece haber tenido el cambio que se esperaba, o que se la hayan tomado muy en serio.
Las causas por manejo en estado de ebriedad en los juzgados de Garantía son una constante. Las últimas acusaciones que presentaron fiscales así lo confirman.
El fiscal Eugenio Campos cerró la investigación en contra de Felipe Octavio Núñez Santana, para quien está pidiendo 800 días de presidio, multa de cuatro unidades tributarias mensuales y suspensión de la licencia de conducir por el plazo de dos años, por considerarlo autor de guiar un vehículo motorizado en manifiesto estado de ebriedad, sin haber obtenido licencia de conducir.
El 9 de julio pasado, en la madrugada, Núñez conducía en manifiesto estado de ebriedad un vehículo Hyundai, modelo Elantra, por calle Santa Juana, Población Archipiélago de Chiloé y a causa de su ingesta alcohólica, impactó diversos autos estacionados en ese sector, provocando cuantiosos daños.
El informe de alcoholemia arrojó 2.38 grados de alcohol por mil en la sangre, emanado del Servicio Médico Legal.
El fiscal jefe de Punta Arenas, Felipe Aguirre, presentó acusación por el mismo tipo de delito.
El imputado es Jorge Fernando Huenchur Vargas, para quien solicita la pena de tres años de presidio, el pago de una multa de ocho unidades tributarias mensuales y suspensión de la licencia de conducir por dos años.
Esta persona, el 1 de junio, a las tres de la mañana, conducía en estado de ebriedad un Datsun, modelo Laurel, por Zenteno al norte, y al llegar a Paraguaya no respetó la señal Ceda el Paso.
Cuando Carabineros intentó fiscalizarlo, huyó por diversas arterias y al llegar a Márquez de la Plata esquina Francisco Javier Reyna se bajó del vehículo y continuó la huida a pie, siendo alcanzado en Mateo de Toro y Zambrano.
Ahí los carabineros se percataron que se encontraba en estado de ebriedad.
El acusado no autorizó la toma del examen de alcoholemia y el médico de turno consignó como diagnóstico del imputado: “agresivo, no se deja controlar, etilismo agudo”.