En su declaración la menor dijo que su padrastro le decía que estaba enamorado de ella, que la grababa manteniendo relaciones y que él también se registraba en videos, los que le enviaba a su celular. Justamente, una de esas imágenes fue las que encontró su madre, motivando la denuncia. A la cárcel fue enviado un hombre de 37 años, quien fue denunciado por un sórdido caso de abuso sexual, el que tiene como víctima a una niña de 15 años.
Los antecedentes no sólo dan cuenta de constantes agresiones sexuales, también de producción y almacenamiento de pornografía infantil.
Ayer, en el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, el fiscal del Ministerio Público, Fernando Dobson, formalizó al imputado J.V.M.D.V. (sólo iniciales para proteger la identidad de la víctima), quien fue detenido la noche del sábado en el cuartel de la PDI.
Denuncia
Los hechos que motivaron la detención del jefe de hogar fueron a raíz de la denuncia interpuesta por la madre de la menor de 15 años, quien encontró en el teléfono celular de su pareja, imágenes de su hija y él al interior de un motel, evidenciando dichas fotografías escenas explícitas de las relaciones sexuales que mantenían.
En la audiencia se comoció la declaración de la propia víctima, quien relató cómo se llegaron a concretar los actos de connotación sexual del cual fue víctima de parte de su padrastro, desde el mes de septiembre del presente año. “Cuando estaba cursando cuarto básico él llegó a vivir con nosotros, y desde allí ha sido como mi papá, debido a que no tengo relación con mi padre biológico, por lo que siempre (el imputado) me ha tratado como a una hija”.
La menor agrega en su declaración que hace tres años (su padrastro) había engañado a su madre y se habían separado, “pero cinco meses después volvieron porque tuvieron una hija, mi hermana que ahora tiene cuatro años”.
Añadió que el imputado trató de ganar su confianza en un viaje que realizaron al norte del país. En esa oportunidad, le preguntó en varias ocasiones si ella ya había mantenido relaciones sexuales, comenzando desde ese entonces a realizarle proposiciones de índole sexual.
De regreso a Punta Arenas, recuerda que entre el 22 y 23 de septiembre de este año su padrastro comenzó a tocarla, diciéndole que ya no la veía como a una hija sino como a una mujer.
Agrega que él era insistente, pese a que siempre trató de evadirlo.
Cuenta que un día la fue a buscar al colegio y la trasladó a su casa, que está deshabitada. “Me obligó a entrar, me sacó la ropa, tuvo relaciones conmigo, a pesar que me negué, no me gustó lo que hizo, pero callé porque pensé que le podía hacer daño a mi mamá y a mi hermana pequeña”.
Agrega que “intenté contarle a mi mamá, pero empezó a ganarse mi confianza diciéndome que estaba enamorado de mí y que cuando tuviera 18 años se casaría conmigo. Luego me llevó al Parque Chabunco y en el auto otra vez mantuvo relaciones conmigo. Otro día me llevó a su casa, me presionaba para ello”.
La menor recuerda que “el 21 de noviembre me llevó a un motel, me grababa, todo era novedoso y lo dejaba. Con mi teléfono celular me grabó teniendo sexo con él y luego estos videos lo traspasaba a su celular y a su notebook”.
Cuenta, además, que también se grababa desnudo y en actos de fuerte connotación sexual, registros que se los hacía llegar a ella a través de su celular.
Fiscal Dobson
Con la declaración de la víctima, el fiscal Fernando Dobson solicitó la prisión preventiva para el imputado por representar su libertad un peligro para la seguridad de la sociedad, solicitud a la que se opuso el abogado defensor, Pablo Santander, quien alegó que se acogiera la irreprochable conducta anterior del imputado y que el material exhibido ante el juez había sido sacado de manera ilegal y en contra de la voluntad desde las pertenencias de J.V.M.D.V.
El representante del Ministerio Público indicó que los delitos por los que formalizó al imputado tienen una pena de crimen. “Desde el 6 de diciembre que, junto a la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI, venimos realizando esta investigación. Aquí la madre de la menor denuncia estos hechos, luego de darse cuenta que su hija mantenía relación con su pareja, por lo que fue formalizado por los delitos de abuso sexual, estupro reiterado, y producción y almacenamiento de material pornográfico infantil. Con los medios incautados pedimos la medida de prisión preventiva por la gravedad y la cantidad de delitos”.
Juez de garantía
A tenor de los antecedentes expuestos en la audiencia, el juez de garantía, Juan Villa, ordenó enviar a prisión preventiva al hombre de 37 años por 60 días, plazo que se fijó para el cierre de la investigación.
El delito de estupro tiene una pena de crimen, la cual puede llegar a los 10 años de cárcel efectiva. Los otros delitos tienen penas menores, pero el cúmulo de estos pueden hacer que al imputado eventualmente se le pueda aplicar una pena de esa naturaleza.