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Los hechos
La denuncia fue realizada por personal militar de la IV Brigada Acorazada Chorrillos, que se encuentra ubicada en el sector de Ojo Bueno, a 12 kilómetros al norte de Punta Arenas. Por instrucción de la fiscalía local personal de la Sección de Investigación Policial (SIP) de Carabineros comenzó a trabajar en el caso con el fin de dar el paradero de dicho generador, el que fue localizado a través de internet, mediante un aviso de venta.
Álvaro Muñoz, comisario subrogante de Carabineros, informó que “el día 15 de noviembre personal del Ejército realizó una denuncia por la sustracción de un generador eléctrico que se encontraba al interior del regimiento. Tras las diligencias realizadas por personal SIP de la institución, se recibió la información que a través de una página web se vendía una especie de similar característica”. El oficial policial agregó que con estos antecedentes y luego de un trabajo investigativo, se pudo determinar que era el elemento parte de la investigación, por lo que se dispusieron las acciones tendientes a poder dar con el vendedor, y tras concretar una posible transacción, ubicaron el domicilio y al ver la especie, se materializó la detención de un sujeto menor de edad, iniciales N.S.V.A., el que deberá responder ante la justicia por el delito de receptación. En este hecho no se descarta que este menor pudiera haber recibido la ayuda de un tercero, por cuanto su ingreso al recinto militar y la facilidad para robar las especies, son parte de la investigación que aún está en curso.
Agente revelador
En este caso, la materia investigativa tuvo una arista poco usada en este tipo de procedimientos, y que es frecuentemente utilizada en delitos de droga, como lo es la incorporación del agente revelador.
La norma chilena establece como agente revelador, a los funcionarios policiales que simulan ser comprador o adquirente, para sí o terceros, de sustancias estupefacientes o sicotrópicas, con el propósito de lograr la manifestación o incautación de drogas, lo que en este tipo de ilícito se usa para establecer un delito del tipo complejo. Bajo esta figura un funcionario policial, tras acordar la compra del producto, se trasladó hasta un domicilio en la Población Carlos Ibáñez del Campo donde se finiquitó el procedimiento que ahora está en manos de la fiscalía de Punta Arenas.