Numerosas familias y representantes de organizaciones y servicios públicos ligados al Barrio Archipiélago de Chiloé, se dieron cita en la inauguración de la sede vecinal correspondiente a la junta de vecinos Goleta Ancud. La ceremonia estuvo encabezada por el Alcalde de Punta Arenas Emilio Boccazzi, el Gobernador de Magallanes Segundo Álvarez, la concejala Claudia Barrientos y el presidente de la organización vecinal, Jorge Risco.

La nueva sede, de 147 metros cuadrados, consta de hall de acceso, salón de eventos, oficina, servicios higiénicos para damas, varones y personas con discapacidad.

El edificio se ubica en Avenida Castro, junto al jardín infantil intercultural y la multicancha del barrio Archipiélago de Chiloé, integrando un importante centro del accionar comunitario.

La inversión de 91 millones 749 mil pesos, fue aportada por el Fondo Nacional de Desarrollo Regional 2012.

El alcalde de Punta Arenas Emilio Boccazzi, expresó su alegría por inaugurar esta obra largamente esperada, debido a que sufrió sucesivos daños que debieron ser reparados, tardando su puesta en marcha.

En este sentido, el edil comprometió su apoyo para recuperar este tiempo perdido mediante la prestación de servicios municipales en el recinto y la realización de actividades deportivas y artísticas, que enriquezcan la vida en el barrio, de tal manera que sea conocido como un sector donde hay mejor comunidad y donde existe un afiatamiento con el entorno.

Llamó a los vecinos y vecinas a sentir este espacio como propio y aportar propuestas a la directiva para generar emprendimientos que favorezcan la creación de lazos de afecto y beneficios a la comunidad.

Por su parte, el presidente de la junta de vecinos Goleta Ancud, Jorge Risco, agradeció el apoyo de la Municipalidad y llamó a los vecinos y vecinas a integrarse de lleno a las actividades que se realizarán en la nueva sede, entre las que se cuentan operativos preventivos que llevará a cabo el Centro de Salud Familiar Juan Damianovic y Carabineros, un proyecto de Fide XII, talleres infantiles desarrollados por una iglesia evangélica y una biblioteca comunitaria instalada por la Dirección de Bibliotecas Públicas en uno de los salones.

El dirigente señaló que como organización vecinal desean “hacer conciencia que vivir en una población es difícil pero se puede hacer todo con mucho esfuerzo, con ganas y con el compromiso de todos quienes habitamos en ella.

A medida que los jóvenes comprendan que esta casa es para ellos y quizás si se quedan a vivir en nuestra población va a ser para sus hijos, vamos a crecer como barrio, cumpliendo el anhelo no sólo de esta directiva, sino también de directivas anteriores que lucharon por tener esta sede”, puntualizó.