Muebles Capricornio fue una de los comercios afectados. Su dueño, Roberto Núñez, explicó que “las principales pérdidas fueron de mercaderías y de infraestructura del local, porque hubo que restaurarlo y hacer una serie de cambios. Se nos echó a perder lo que teníamos principalmente en bodega”, dijo.
Agregó que sacar los muebles es uno de los principales problemas que enfrenta actualmente, porque no tienen una puerta lateral como la que existía antes del desborde
Otros afectados
Núñez también es propietario de otros dos locales del sector y tuvo que disminuir los arriendos, lo que le significó pérdidas cercanas a los 10 millones de pesos. Comentó que es difícil calcular en cuánto tiempo va a recuperar lo perdido, debido a que dependerá de otros factores, como el movimiento comercial a futuro, por lo que no tiene una apreciación concreta en este momento.
También explicó que durante la construcción del puente, circuló menor cantidad de gente.
Rosa Díaz, dueña de una peluquería en el lugar, piensa que “si se mantienen las cosas como ahora, dentro de un año recuperaría lo que perdió durante estos meses, para poder volver a la normalidad.
Explicó Díaz, que el cambio que se apreció estos días, con el pronto término de las obras, “es que la gente ya transita por el sector y ve que varias de las tiendas están abiertas”.
Agregó que ahora “hasta los clientes antiguos están volviendo”, notándose una gran diferencia y que ya han subido entre un 20 y 30% en cuanto a sus ventas.
En tanto, el comerciante Luis Alarcón manifestó que logró salir adelante gracias a créditos que pudo captar en la banca privada. “Con eso pude reparar todo el piso del local”, finalizó.