Los hechos ocurrieron cuando la vendedora B.R.C., de 38 años, se encontraba al interior de la tienda Ripley, ubicada al interior del Mall Espacio Urbano de Punta Arenas, realizando sus labores como vendedora. Esta mujer fue advertida a través de las cámaras de vigilancia que mantenía gran cantidad de prendas de vestir en su caja, momentos en que se acercó un hombre con dos niñas, ésta procedió a la entrega de los paquetes, saliendo con más de diez bolsas, momentos que fueron interceptados por personal de seguridad del local y por personal de la PDI. “Ella facilitaba sacar especies de la tienda, para lo cual participaba su pareja y las hijas de ambos, menores de edad, simulando una venta normal, indicó el jefe de la Brigada de Robos de la PDI, Iván Villalón. Hasta el momento se desconoce desde cuando venían realizando este tipo de ilícito, por ahora lo recuperado pertenece a prendas de mujer y se está investigando si las utilizaban para la venta en el comercio informal”, comentó Villalón.
Formalización
En la audiencia de formalización de la investigación, y control de la detención, el fiscal Eugenio Campos Lucero solicitó al tribunal la aplicación de la medida cautelar de arraigo regional y prohibición de acercarse a la tienda para ambos imputados, la mujer B.R.C., formalizada por el delito de hurto agravado y L.P.C., de 47 años, por hurto simple, medida que el Tribunal de Garantía accedió, fijando un plazo de 90 días para el cierre de la investigación.
Por existir en este caso la utilización de menores, se entregan sólo iniciales de los imputados, con el propósito de resguardar la identidad de las menores, esto de acuerdo a la Ley de Menores.
Los antecedentes respecto a que los imputados utilizaron a las menores de edad, fueron entregados al Juzgado de Familia para el inició de una investigación paralela.
Por otro lado, la mujer mantenía una causa pendiente en el Juzgado de Letras y Garantía de Puerto Natales. Por este motivo en la misma audiencia se fijó para marzo la preparación de juicio oral por otra causa.