Como indicó la presidenta del sindicato, Ana Aribel, no descartan igualmente pedir aportes voluntarios. Independiente a la deuda que mantiene la empresa encargada del servicio de cobro de estacionamiento, Epark, con la Municipalidad de Punta Arenas, debatiéndose una propuesta que deberá ser votada por tercera vez en sesión de Concejo Comunal, los 70 trabajadores que mantiene la compañía, viven una historia aparte, y permanecen preocupados debido a que el 31 de diciembre quedarán cesantes.
Es por este motivo que se encuentran analizando planes de contingencia, esperando, como dijo la presidenta del sindicato, Ana Aribel, poder “subsistir” durante enero con el dinero del finiquito, aunque no descarta que se realicen peticiones de aportes voluntarios u otro tipo de actividades, como bingos, considerando además que algunos funcionarios que llevan poco tiempo no contarían con una suma de dinero que les permita “pasar el mes”
Dijo la dirigenta que ayer conversó telefónicamente con el gerente Carlos Soto, quien le manifestó que los sueldos se cancelarán el 5 de enero y los finiquitos el 15 del mismo mes.
Lo anterior considerando que el 1 de febrero debería iniciar funciones una nueva empresa, luego que resultara desierta la anterior licitación del municipio, dado que el único oferente que se presentó no cumplió con todos los requisitos solicitados.
Postura del
concejal Romo
Quien ayer se manifestó preocupado por esta situación, cuyo voto hubiese sido definitorio en la sesión de Concejo Municipal del lunes, donde en un doble empate se determinó que no se apruebe la propuesta del alcalde Emilio Boccazzi, sobre la formulación de un acuerdo con Epark para la cancelación de la deuda a través de pagos parcializados, es el concejal David Romo, quien no quiso aventurar cuál será su votación en la próxima reunión, pero dejó en claro, al igual que Juan José Arcos, que es mejor asegurar los pagos a arriesgarse en un juicio por más de 2.000 millones de pesos.
“Hay una deuda y hay que cobrarla”, aseveró.