
La Presidenta brasileña, Dilma Rousseff, partió hacia el Estado de Minas Gerais, para sobrevolar las zonas afectadas por lluvias que en esa región y en el vecino Estado de Espíritu Santo han causado 45 muertos. Rousseff estaba en una playa cercana a Salvador desde este jueves, cuando inició un período de descanso que se prolongará hasta el próximo 6 de enero, pero decidió interrumpirlo para visitar hoy algunas zonas de Minas Gerais y discutir la ayuda que se puede brindar a los damnificados.
De acuerdo con una nota de prensa publicada en un medio nacional En Minas Gerais, Estado natal de la Mandataria, hasta ahora las lluvias han obligado a unas 10.000 personas a abandonar sus casas.
Agrega que, los otros muertos y el resto de los damnificados, que en total superan los 65.000, se han registrado en Espíritu Santo, Estado que la presidenta visitó el pasado martes.