Para el sicólogo de Megasalud, Ricardo Bascuñán, los resultados de la encuesta podrían tener dos razones. El estrés prevacacional tiene que ver con el alto nivel de exigencia y ritmo de trabajo que en los últimos años nuestro país ha ido experimentando.
“Prueba de ello es la alta cantidad de licencias médicas por estrés laboral, tendinitis, cervicalgia, cefaléas tensionales, etc… Diagnósticos que antiguamente no eran frecuentes en la atención primaria. Por lo tanto, las personas anhelan de forma “desesperada” estar lo antes posible de vacaciones y claramente, esto aumenta los niveles de angustia y de estrés”, explicó.