
El hecho de sangre causó gran conmoción el año pasado, por los ribetes mismos del caso. La mañana del 23 de marzo, estando la víctima en su casa en calle Cirujano Guzmán del Barrio Prat, con sus dos hijos menores de edad, llegó el ex conviviente y padre de los niños, Álex Vidal, quien comenzó a insultar a la mujer. El sujeto estaba fuera de sí, tomó un cuchillo y procedió a agredirla en forma reiterada en diversas partes del cuerpo, dejándola con heridas múltiples.
Estos son los pormenores de los cuales da cuenta la acusación que presentó el fiscal Eugenio Campos en contra del imputado, quien desde la fecha de ocurridos los hechos permanece en prisión preventiva.
Según la investigación de Campos, el enceguecido hombre le arrojó liquido combustible a la ropa de su ex conviviente a quien en esos momentos arrojó al suelo y continuó agrediéndola con el cuchillo que tenía en sus manos.
Hijo auxilia a su madre
Fue en esos momentos que uno de los hijos, de siete años, se percató de lo que estaba sucediendo con su mamá y salió corriendo a pedir ayuda a la abuela que vive en la casa principal. Familiares de la víctima impidieron que Vidal siguiera agrediendo a su ex pareja quien salió corriendo y se dio a la fuga, mientras ella se desangraba en el suelo.
Al Hospital Clínico de Magallanes ingresó en estado grave debido a las “múltiples heridas cortopunzantes, alrededor de 17”, reseña el fiscal. Los médicos le diagnosticaron una “herida penetrante abdominal complicada, lesiones al intestino delgado y pérdida de sangre por herida hepática”, todas de riesgo vital de no mediar la atención médica oportuna que recibió.
El Ministerio Público pide que el acusado sea condenado a 10 años de cárcel y que concurre la agravante de “emplear medios o hacer que concurran circunstancias que añadan la ignominia a los efectos propios del hecho”.