
Los rescatados fueron revisados por médicos y luego fueron entregados a la policía. No hubo reportes inmediatos de muertos ni heridos.
Las operaciones de rescate cesaron al anochecer, pero guardias de seguridad privados de la mina permanecían estacionados alrededor del pozo y la policía también estaba pendiente para arrestar a cualquier otro minero que saliera a la superficie.
Policías que patrullaban en el suburbio semirural de Benoni, donde se ha extraído oro durante décadas, fueron alertados por gritos de los mineros atrapados.
Los socorristas usaron una grúa para mover una gran losa de concreto que obstruía el pozo que pertenece al productor chino de oro Gold One.